domingo, 26 de agosto de 2012

Antología


La fragilidad de mis sentimientos ha hecho que encuentre una razón para nunca dejar de quererte; cada vacio que tiene mi vida, es una parte de la tuya que marcada por una inicial de tu nombre, llenan imperfectamente; la calamidad de mis falsas virtudes, me han enseñado ante tu mirada que lo hermoso de mis defectos, despiertan mas tu atención; los sueños depositados en mi almohada, buscan rozar lo oscuro de tus cabellos para entregarte lo que significa una madrugada llena de Amor por ti; y aunque mis metáforas se suelten como paradigmas hechiceros, es mas el hechizo de recordar un buen Amor de Noviembre, y querer morir por siempre en el”

Aunque el tiempo pase lento, y las actitudes nos delaten al querer lo contrario, nuestros corazones siguen latiendo al mismo ritmo. Es glorioso y doloroso poder recordar aquellos días donde la sinonimia de nuestros actos, lo eran todo ante la mirada de lo imposible. El velo de la luna, era descubierto por nosotros y todas aquellas teorías de enfermería que hasta ahora no entiendo, y aunque escribí miles de formas de cómo curar una herida, nunca entendí porque se necesita tanta teoría para brindar pastillas por segundo, en vez de Amor.

Con el pasar de los días me convertí de un ingeniero que vive tecleando su vida frente a un mostrador, a ser el sobrino no reconocido de Florence Nightingale, y aunque la parodia busca el cómo explicarte un momento en singular, entonces que sean todos aquellos donde de tu mano aprendí el verdadero valor de la persistencia y el que todo es posible… Algún día llegue a confundir un PAE como un “Proceso de cómo Amar  a una Enfermera”, y ciertamente me gradué en eso.

Aunque al final de todo, nunca recibí ni bachiller, ni ceremonia de graduación;  si recibí la emoción de aquel orgullo por sentirme parte de tus líneas. No de aquellas líneas donde las metáforas salen a brote de suspiros, o aquellas donde los sentimientos dejan impreso en una hoja de papel el Amor, si no de aquellas donde la vida la convierte en un recuerdo eterno, y uno se queda por siempre en el corazón.

Y bueno, con tantos sublimes momentos, circunstancias inexplicables, locos recuerdos y noches a punto de estallar, llegue a Amarte con todo el alma. Y si algo de todo aquello que hemos vivido quiero rescatar, lo seria todo, pero que mejor baúl para guardar todo lo hermoso que el pasado, y que mejor recuerdo para comenzar de nuevo que el mismo.

“Aunque todo ha cambiado, aunque ya nada es lo mismo, aunque la vida siga y el tiempo sea ingrato; no quiero cometer el mismo error de siempre, no quiero serle indiferente a lo poco que creo del destino, yo solo quiero robarte una sonrisa a costas del orgullo mezquino y entregarte la felicidad en porciones que degustes mejor… Si en algo sirve, el que mi cuerpo este aquí y tenga el corazón latiendo mas en tu nombre, por favor no me quites el aliento para seguir viviendo, que entenderé el delirio cuando vea el sol saliendo, y una lagrima será el límite para ocultarlo”

A Sinyant.

Versos de Noviembre

Mis días no empiezan con madrugadas,
si es que no es tu mirada la que me despierta de mí soñar,
sintiendo esa presencia de tu aroma,
acompañando mis historias de tus manos en mi andar.

Al aire le faltan suspiros,
aquellos tuyos que uno solo puede disfrutar,
ilusionadamente me siento culpable,
de que el aire no se acabe por hacerte suspirar.

Las noches no muy tardías encuentran frío,
cuando tus dedos no se enlazan con los míos,
busco robarte un abrazo a cada instante,
pretendiendo convertirme en tu fiel amante.

Y a Dios le ruego para que borre el miedo,
aquel que te enamora cuando yo llego,
o mejor le pido a Santa María,
que haga de mis palabras agonías,
y de este Amor un recital.

Y solo quiero complementar tu vida,
recordar mediante fotos mi loca manera de Amar,
saber que eres tú la que se lleva,
lo mejor de mi vida al respirar,
en unos versos de Noviembre,
a donde quiero regresar.

A Sinyant.