miércoles, 1 de julio de 2009

Discurso a la belleza

... “Cuantas cosas enigmáticas nos rodean y sin pensar ni un segundo en la esencia que poseen, las desechamos; cuantos artilugios viven dentro de nosotros y sin tener las palabras que las sostengan, las fingimos en rústicos actos; cuanto placer nos da la inmortal naturaleza y sin piedad a su color, la hacemos gris de robustos hachazos… Cuantos milagros se necesitan en la realidad inoportuna para cambiar la tonalidad de los billetes y cuanta madurez tendremos que enervar para limpiarnos los ojos que cegaron al no ver lo que nuestra conciencia buscaba, la BELLEZA”

En cada paso incierto o cualquier situación meditabunda se encuentra impregnado el sello de un pavoroso momento que conlleva a la inspiración; camina dentro de sombras intelectuales y brillos sin razón de ser, se esconde dentro de versos ahumados y rimas desentonadas, no se mide ante nuestros sentidos y no discrimina a ningún ser, no vive dentro de religiones pero se podría considerar como una religión, quizás es un regalo efímero por fuera pero si un secreto eterno por dentro…

… Encontrarla no es un desafío pero saber apreciarla quizás… Puedes mirar a los pétalos de una rosa o sentir los suspiros de una bella dama; llorar la poesía que es la vida o sonrojar a los sueños del alma; caminar dentro de paisajes de color eterno, respirando cada aroma que engalana al mundo y así poder rescatar aquellas beldades ignoradas, que buscan perdón en lo profundo.

Con el tiempo he aprendido que los sonidos no se fusionan por bondad, que las palabras no se entrelazan por piedad, que los pensamientos no se escriben por necesidad y que los sentidos no crean arte por inercia. Que los suspiros no se dan solo por cansancio, que las canciones entonan más que un simple destino, que el reflejo de una mirada es el brillo de otra, que los sueños se trabajan y no se luchan, que los recuerdos se convierten en moralejas y el silencio es el sonido de soledad…

… Pues ahí se encuentra la BELLEZA, moldeada a los gustos de la naturaleza, impregnada en cada momento de la vida, reflejada en el canto de algún poeta, trazada en las líneas de algún artista, en la encendida pasión de cualquier pareja y quizás buscando un rincón mas donde se establezca…

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